El pasado 11 de marzo se disputó el partido correspondiente a la vigésima quinta jornada de la liga griega de fútbol, en ella jugaban el Paok de Salónica y el Aek de Atenas.
Antes del partido hubo pequeños enfrentamientos entre la policía y los aficionados del Paok.
El partido se disputó de manera tranquila hasta que llegó casi el final del partido cuando el marcador iba 0-0. El jugador del Paok de Salónica, Varela, marcó un gol de cabeza pero éste fue anulado por fuera de juego de otro jugador que no intervino en la jugada. Por lo que se armó la gorda.
El partido fue suspendido.
Los jugadores del Paok fueron a protestar al árbitro. El propietario del Club del Paok, Ivan Savvidis, bajó al terreno de juego y le pidió a sus jugadores que salieran del campo, pero se vió que en el bolsillo llevaba una pistola, hecho inconcebible en un campo de juego.
Finalmente el árbitro redactó el acta dando ganador al Paok, 1-0 frente al Aek Atenas.
El propietario del Paok le dijo al colegiado: "Estás muerto". Por estas palabras y el hecho de llevar un arma en un terreno de juego, han sancionado a Ivan Savvidis, prohibiendo su entrada a un estadio de fútbol durante los próximos tres años.
Al equipo Paok de Salónica le han restado 3 puntos y le han impuesto una multa al club de 63.000 €.
Bochornoso episodio, de nuevo en el fútbol.
¡ Ojalá no haya más sucesos como este!
SERGIO M.
Totalmente de acuerdo contigo Sergio, es una vergüenza cualquier acto de violencia,y este está totalmente fuera de lugar.
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